Desconocido en el universo
pambolero, este defensor nacido en Olimpo de Bahía Blanca, Fernando Troyansky dejó un gran recuerdo en el Austria Viena, uno de los equipos más importante de
Austria. Tuvo tres etapas: 2001 - 2002, 2003 - 2009 y 2010 - 2011. Se convirtió
en ídolo de esa zona del mundo.
Troyansky, explicó que uno de los beneficios de este sistema
de entrenamiento es que te permite mantener el estado de forma.
"Yo
jugué fútbol durante más de 13 años en Austria y hacia el final de mi carrera
trabajamos mucho con electroestimulación en el equipo Austria de Viena",
contó a BBC Mundo.
"Su beneficio fue tal que el preparador
físico se sacaba un peso de encima cuando los jugadores se estaban recuperando
de una lesión y los mandaba a sesiones de electroestimulación para que
mantuvieran el nivel físico necesario, aún tratando la lesión, es decir dirigía
el trabajo a la zona necesaria sin fastidiar lo demás"
"Con una lesión es difícil trabajar todo
el cuerpo, por eso con el chaleco puedes enfocar la actividad en ciertas zonas,
es una pena que esto llegará al final de mi carrera, sin duda una tecnología
que ayudará mucho a los futuros futbolistas".
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